Desde molinos, como éste de Witherington Flax, en Shrewsbury, hasta fundiciones de acero o centrales eléctricas, el Reino Unido tiene un enorme patrimonio cultural originado en la revolución industrial. Pero, según English Heritage, la institución que se encarga de la conservación del patrimonio histórico inglés, casi el 11% de esos edificios están en peligro.
Entre los edificios amenazados se encuentran algunos lugares icónicos como la central eléctrica de Battersea, que fue diseñada por Giles Gilbert Scott en los años 30.
El tren de Bowes, en Tyne y Wear, fue diseñado por el ingeniero pionero del ferrocarril George Stephenson en la década de 1820. Esta línea férrea se construyó para transportar carbón desde las minas de la zona hasta el río Tyne.
De acuerdo con English Heritage, el 40% de los edificios industriales clasificados como protegidos podría destinarse a usos nuevos que podrían ser económicamente sostenibles. El tipo de patrimonio industrial varía de una región inglesa a otra. En el este del país abundan los molinos de agua y de viento, como el de North Leverton en Nottinghamshire (en la imagen). En el sudeste existen numerosas infraestructuras relacionadas con el mar y en el norte se concentran las antiguas fábricas textiles.
El interior de la estación de bombeo de Crossness, en Bexley, está decorado profusamente. English Heritage estableció unas serie de nuevas guías para la conservación del patrimonio industrial.
Algunos de estos vestigios de la revolución industrial ya fueron transformados para nuevos usos. El molino North Mill en la ciudad de Belper, en Derbyshire, es en la actualidad el centro de visitantes del valle de Derwent y el East Mill, en la imagen, alberga numerosas pequeñas empresas.
Datos de BBC Mundo, 12 de noviembre de 2011. Más información de edificios aquí
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Bienvenido a creartehistoria, aquí tu opinión importa.